Jazz y blues transforman calles de Zacatecas en una gran ruta sonora

  • Con el inicio de la Tercera Jornada de Jazz y Blues en la Calle y la propuesta musical de alineaciones locales, exponentes de ambos géneros, en el marco del 18 FIJyB 2025
  • De manera simultánea, en la Sala Mayor del Museo Manuel Felguérez fue homenajeado Víctor Chew, a cuya memoria se dedica esta edición del festival y como uno de sus impulsores

Zacatecas, Zac., 14 de noviembre de 2025.- Zacatecas vivió este viernes uno de los días más dinámicos del Festival Internacional de Jazz y Blues (FIJyB) 2025, con una programación que destacó por sus variaciones en torno a ambos géneros, con el inicio de la Tercera Jornada de Jazz y Blues en la Calle, iniciativa que acercó interesantes propuestas al público, en espacios abiertos y de convivencia cotidiana.

Bajo la organización y coordinación del Gobierno del Estado, a través del Instituto Zacatecano de Cultutra (IZC) “Ramón López Velarde”, la edición 18 del FIJyB se convirtió en un corredor musical, desde las primeras horas de la tarde, con el incio de esta jornada, que destacó por la convergencia de talentos, estilos y escenarios. 

La programación ofreció una ruta sonora que se extendió desde los recintos culturales hasta las calles del Centro Histórico, donde inició de manera oficial, con presentaciones simultáneas que marcaron el espíritu expansivo del festival. 

En la Sala Mayor del Museo de Arte Abstracto “Manuel Felguérez”, el grupo Zitrus Jazz inauguró la velada con “Chew Memories”, concierto en memoria de uno de los impulsores de este Festival en Zacatecas, Víctor Chew, a quien además se dedica esta edición del FIJyB.

De manera paralela, las calles del Centro Histórico cobraron vida con los primeros “spots” de la jornada callejera. En Avenida Doctor Ignacio Hierro, frente al Centro Cultural Ciudadela del Arte, The Lighthouse presentó “Volteando a ver al cine”, un ejercicio musical inspirado en paisajes sonoros cinematográficos. 

En el Callejón Luis Moya, Ernesto Saldaña encendió el ambiente con su blues y rock instrumental en “Al anochecer”, mientras que en la Plazuela Santo Domingo, el grupo Caxcanes desplegó la potencia de “Sonidos de alta frecuencia”, con el que atrajo a decenas de espectadores espontáneos.

A las 20:00 horas, la programación se amplió tanto en sala como en calle. En el Museo Manuel Felguérez, el Alan Bazavilvazo Power Quartet ofreció un concierto memorable con “Miríada rítmica”, en el que fusionó jazz y música del mundo con gran energía interpretativa. 

En la calle, nuevamente en Avenida Ignacio Hierro, Apzu presentó “Alegorías”, un viaje de jazz fusión; en el Callejón Luis Moya, Moan Blues llevó la intensidad emocional de “Donde duele el alma”; y en la Plazuela Santo Domingo, Hijos de la Viuda Blues Band dio fuerza al blues tradicional y rock progresivo, desde una perspectiva contemporánea.

La noche avanzó hacia atmósferas más íntimas con la presentación de Pájaros Amapola, en Mi Dalí Café, donde la mezcla de lo-fi, dream pop, shoegaze y fusión jazz de “Cuando inicia un final” ofreció un respiro sensorial dentro de la programación alternativa del festival.

En el cierre de la jornada en sala, el escenario principal del Museo Manuel Felguérez recibió a Arista 5 & Luis Humberto Ramos, quienes entregaron una actuación sólida y de gran nivel, y con la que reafirmaron en conjunto la presencia del jazz mexicano en el marco del festival.

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